CAPITULO I El secreto de Lotor Las grandes puertas del viejo castillo Galra se abrieron a la par, dejando entrar una comitiva de cortesanos que transitaban en caravana sobre una rojiza alfombra que les servía de guía por el pasillo principal. Sólo se escuchan los ecos de pasos, y murmullos en el amplio espacio con columnas de piedra y ornamentos de metal. Un anciano Galra de cuerpo encorvado aparece en escena, descendiendo con dificultad por unas escaleras, con un gesto rinde pleitesía a los presentes, e inclinado su cabeza se dirige en tono solemne a quien encabeza la comitiva: - Bienvenido sea a su castillo, Príncipe Lotor. No esperábamos su visita. Es un honor tenerlo de vuelta luego de tantos años. - Basta de formalidades viejo Jobar, que no vine en visita oficial, vengo a buscar algo que me pertenece. - Todo el castillo le pertenece mi señor. - En realidad yo le pertenecía al cas
Un blog para sentir y soñar